Para los nostálgicos de los 90, la película «Singles» (o «Vida de Solteros») incluía uno de los mejores soundtracks que el séptimo arte ha podido ofrecer. Un gran homenaje a los grupos salidos de Seattle en aquella década, y entre tanto Pearl Jam, Alice in Chains o Soundgarden, una canción se abría paso por méritos propios.

Se trataba de «Nearly Lost You» de unos excelentes Screaming Trees, cuya característica más interesante se ubicaba en la penetrante voz de su cantante, Mark Lanegan.

El grupo se disolvió hace ya años, pero el enigmático vocalista se mantuvo por demás activo, entre discos solistas y grosas colaboraciones con gigantes como Queens of the Stone Age, Soulsavers, PJ Harvey o Moby. Y desde hace ya un buen tiempo, bajo el nombre de Mark Lanegan Band.

«Gargoyle» es el cuarto trabajo bajo esta denominación y ofrece una decena de canciones que pueden ser agrupadas en dos universos diferentes: las canciones más eléctricas, como «Death’s Head Tattoo», «Nocturne», «Beehive», «Drunk on Destruction», todas volando alto gracias a sus envolventes guitarras y marcadísimos bajos, con el inconfundible registro de voces, cortesía de un inacabable Lanegan, con brillantes resultados oscuros y algo góticos.

Y alternando estos sonidos, títulos como «Blue Blue Sea», «Sister» y especialmente «Goodbye to Beauty» o «First Day of Winter», brindan una atmósfera relajada, con aires casi gospel, básicamente sin percusión y con intensos arreglo de guitarras y teclados.

No se trata de un disco de fácil acceso. No son canciones que uno escucharía en una farra ni todos los días, aunque precisamente ahí está lo bueno. Y es que Mark Lanegan es dueño de una de las voces más hipnóticas de la actualidad y «Gargoyle» es su trabajo más cohesionado con este nombre.