Así la pasamos junto al río, en Riversounds

Llegué al festival justo antes de la presentación de Bomba Estéreo. El clima, que tuvo a un intenso calor como principal protagonista del día, se presentaba fresquísimo, y la buena cantidad de gente estaba con todas las ganas de seguir de fiesta.

Confieso que cuando habían anunciado la inclusión de los colombianos al cartel del Riversound, quedé con muchas ganas de verlos, ya que la propuesta musical del grupo de Bogotá me parecía por demás interesante y sabía que su mezcla de ritmos y canciones fiesteras habían brindado buena reputación al grupo.

De todas formas, su presentación no resultó del todo buena y, si bien generaron entusiasmo en parte del público, no terminé de entender la ecuación, que me dejó con la sensación de que al grupo le faltó definir del todo su estilo en vivo, ya que justamente la mencionada mezcla de ritmos fue lo que dejó al grupo sin un eje central y demasiada mixtura acaso terminó siendo excesiva hasta para ellos mismos y culminaron su show sin pena ni gloria tras poco más de una hora.

La espera para ver a los californianos fue breve pero ansiosa. Había pasado bastante desde el tremendo apogeo del quinteto a comienzos del presente milenio, pero un show de esta naturaleza es siempre atractivo.

Con luces bajas y humo en el escenario, una puesta en escena genial, no sólo en cuanto al escenario, sino al evento en general que se montó junto al río. Minutos después de las 23hs, se ve aparecer a cada miembro caminando tranquilamente, se calzan los instrumentos y arrancan como si nada. El sonido fue de bien a mejor en los primeros instantes.

Si bien el grupo se encuentra de gira promocionando su octavo álbum, apropiadamente titulado “8,” los temas más celebrados de la noche pertenecen a sus trabajos anteriores, especialmente con los exitosos “Make Yourself” de 1999 y “Morning View” del 2001. Lógicamente el público reaccionó con sobrado entusiasmo durante las primeras canciones, pero fue con «Anna Molly» donde los fans comenzaron a corear sonoramente, dando un sabor especial a la primera y fresca noche de primavera.

El grupo se muestra en envidiable forma y es todo un ejercicio de valentía escoger a un favorito. Brandon Boyd obviamente tiene las de ganar; y es que su entrega e intensidad no disminuyen durante las dos horas de show. De todas formas, ver a Ben Kinney al bajo, con una seguridad y estilo impecables, es todo un placer. Él, junto al fantástico ritmo impreso por un limpísimo José Pasillas en la batería, crean una base por demás sólida que permite el lucimiento de Mike Eizinger en la guitarra, quien con sus efectos llena cada espacio restante de forma sencilla, aunque, eso sí, con varios solos impecables.

Chris Kilmore completa esta ecuación con suficiencia, luciéndose en momentos como “Pardon Me” y “Drive”, dos de los puntos más altos de la noche. Asimismo podemos citar ese verso “Wish You Were Here” de Pink Floyd al final del tema homónimo. O la celebradísima «Are you in» tocada por primera vez en la gira.

Las canciones del nuevo disco encajaron a la perfección dentro del repertorio más solicitado, especialmente «State of the Art» y la genial «No Fun». Aunque eché de menos a las canciones de S.C.I.E.N.C.E., acaso la única cuestión que podríamos citar como negativa para uno de los mejores shows que hemos tenido en nuestro país.

Además, en Riversounds me contaron que…

Entre los comentarios que escuché, Natiruts se había presentado antes con muy buen show, como ya lo hicieron en sus anteriores conciertos en nuestro país, no en balde los brasileros tienen una gran cantidad de fans en Paraguay.

Por su parte, entre los nacionales: Villagrán Bolaños que arrancaron con Vibración y presentaron un set que comenzó a hacer mover a la gente mientras caía la tarde. Los The Crayolas fueron la gran sorpresa para los pocos que se habían llegado al Puerto para esa hora, muy buenos comentarios y sin falta se ganaron algún nuevo fan. Los Mothership tocaron por partida doble, al inicio y al cierre (en el after que se armó) desparramando funk y muy buena onda, como siempre.