2Cellos y su triunfante miscelánea musical

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Durante la espera que se dio antes del inicio del show no pude evitar notar la presencia de numerosos niños en la audiencia. Si bien todos ellos estaban lógicamente acompañados por padres y otros adultos, me pregunté si acaso era un espectáculo adecuado para ellos, ya que algunos, todavía antes del inicio, rápidamente se mostraron inquietos y hasta fastidiados.

Pero apenas pasada las 21:30, tan sólo fue precisa la primera canción ejecutada por el dúo compuesto por Luka Sulic y Stjepan Hauser para que absolutamente toda la concurrencia se viera envuelta en una suerte de hipnosis musical. Y me refiero en estos términos porque durante la breve pero magnífica presentación de estos jóvenes artistas las canciones más sosegadas recibían una atención solemne y silenciosa, como esas bellísimas versiones de “With or Without You” de U2 – dedicada a todas las chicas, según Hauser – o “Fields of Gold” de Sting; y la euforia y la algarabía tomaban el control con los covers más rítmicos y rápidos.

Aparecidos hace sólo cinco años gracias a YouTube y con 3 discos en estudio, se nota a leguas que ya son muy entendidos en la materia del entretenimiento. El dúo saluda, Luka primero, e invita a que uno se relaje ya que no es un concierto de violonchelo común. Por su parte Stjepan utiliza una voz más ¿seductora? para hacer que el sector femenino de la platea sea una en un grito constante.

Ambos animan a aplaudir, cantar y hasta pararse y saltar; los presentes responden muy animadamente en una conexión incesante. Además, la mayor parte de las versiones interpretadas son una delicia.

Y si bien son sólo dos instrumentos sobre el escenario, los adecuados arreglos recorren una variedad de ritmos que abarcan terrenos pop, rock alternativo y hard rock. Con todo esto, sumado al histrionismo del dúo y su contagiante energía, cualquier espacio faltante se ve adecuadamente cegado, más aún con el apoyo de Dusan Kranjc en batería. No faltaron sus covers de Michael Jackson (“Human Nature”, la evidente “Smoth Criminal” y “They Don’t Care About us”), de AC-DC (“Thunderstruck”, “You Shook Me All Night Long” y “Back in Black”), de Nirvana, Muse, Coldplay y varios más. En otras versiones, acaso por demás aceleradas, como en “Where the Streets Have No Name” de U2, el efecto final no termina siendo tan distinguido como en casi todo el resto; pero esto es apenas un detalle demasiado menor y la velada llega a lo inolvidable, con un tiempo que pasó realmente volando.

Finalmente, volviendo a los niños que había mencionado al principio, en medio de uno de los temas de Michael Jackson me volví a fijar y noté una enorme sonrisa en sus caritas, disfrutando el momento a pleno. Qué bueno que hayan ido y que hayan sido partícipes, ya desde pequeños, de un concierto así, que termine siendo tan virtuoso como divertido, para todos los gustos y edades. Si se llega a repetir, no duden y vuelvan a ir.

¡Y esto ya va para todos!