Arctic Monkeys «Tranquility Base Hotel & Casino». Hacé tu reserva.
El nuevo y sexto álbum de los Arctic Monkeys «Tranquility Base Hotel & Casino», narra una historia sombría basada en ciencia ficción, en parte distópica como la de «Blade Runner», y en parte 70tosa como la de «2001: A Space Odyssey», según Billboard.
Su género es definido como «glam, lounge y space pop, con influencias de jazz», y es alabado por Rhian Daly de NME por la calidad y profundidad de sus letras. «Tranquility Base», se llamaba la base donde Neil Armstrong aterrizó en la luna, así que te invito a que escuches este nuevo disco que parece querer llevarnos al espacio y a que lo aprecies por lo que es y no necesariamente por lo que querías que sea.
En efecto, la crítica coincide en que esta es la apuesta más arriesgada y polémica de los Monkeys, y han dicho inclusive que el álbum puede ser «divisivo». Noel Gallagher señaló al respecto: «Realmente, no sé qué hacer de él…tu esperarías unos cuantos coros, pero no tiene ninguno». De todas maneras, aquella misma crítica, en su mayoría, está de acuerdo igualmente en que es una obra de arte (Q Magazine, Pitchfork, NME, etc.).
Algunos hasta consideran que es el «Pet Sounds» de esta afamada banda proveniente de Sheffield.
Asimismo, dado que, entre otros, se abordan temas como religión, política y tecnología, se ha entendido que Alex Turner se muestra «más real que nunca» en esta nueva entrega.
De hecho, si sos fan de los Strokes, te vas a entusiasmar con el primer tema del disco (para mí un temazo) que abre nada más y nada menos con Turner confesando (?) que: «I just wanted to be one of The Strokes, now look at the mess you made me make», y que se llama «Star Treatment»:
Se ha señalado también que el resto de la banda quedó relegada ante lo que parece ser, por momentos, un solo álbum de su líder. Sea como sea, he leído que la banda ha aprobado esta novedosa dirección que ha tomado Turner, y se siente especialmente su presencia en esta otra música que me encantó y que quizás sea una de las más appealing para aquellos fans que quieran escuchar algo más «rockero conservador», dentro de este disco nada conservador, cuyos acordes son más parecidos a los de discos previos.
Se trata de «Four out of Five» y podés sentirla aquí debajo:
Es normal y sano que los grandes grupos de rock evolucionen e impriman un marcado «cambio de ritmo».
Basta con recordar que los Beatles pasaron del sencillo y aclamado álbum «Please Please Me», al psicodélico, bizarro, criticado (y posteriormente venerado) álbum «Revolver». Radiohead hizo lo propio entre “Pablo Honey” y “Kid A”.
No quiero significar que aquí estemos ante el mismo caso, pero sí que no debemos precipitarnos a la hora de juzgar este sorprendente trabajo que demanda tiempo y varias escuchadas para poder dimensionarlo acabadamente, tal y como Turner claramente pretende que hagamos, ya que tras escucharlo por primera vez notarás que es obvio que su intención es que no puedas descifrar y concluir algo definitivo rápidamente acerca de este intrigante y ambicioso disco.
Particularmente, a mí me está atrapando progresivamente su sonido downtempo, cargado de bajo y percusión, experimental y avant-garde. Así que si estás esperando saltar y bailar con una suerte de continuación de AM o de otro álbum anterior, te sugiero que cambies de plan y valores este disco dentro de ese universo musical en el que se sitúa.
Relajáte, hace tu reserva en el Tranquility Base Hotel & Casino, y espero que disfrutes de tu estadía.
Te dejo con este otro tema bastante representativo y en el que sobresale el refinado sonido del piano Steinway Vertegrand que aprendió a tocar bastante bien el amigo Alex:
Abrazos.
Man-e.
