Nadie estará errado al decir que éste era uno de los discos más aguardados en mucho tiempo. Además, para aumentar las expectativas, Matt Bellamy había dicho que con “Drones” el grupo volvería al sonido básico que el trío inglés había obtenido en discos como “Origin of Symmetry” o “Absolution”. Y agregar que el productor era nada más y nada menos que Robert John “Mutt” Lange, es tirar más leña al fuego.

Pues bien, obviando el paupérrimo arte de tapa, “Drones” no da muchas vueltas; tanto musical, como literalmente, cada canción es un poderoso mensaje político y social, llenas de las características guitarras super distorsionadas y percusiones bombásticas, junto a coros bastante pegadizos, como se puede apreciar en el primer single “Psycho”, que también incluye una voz en off a lo Full Metal Jacket.

Es que canciones como “Reapers”, “Handlers” o “Revolt” son realmente explosivas, registrando ese sonido tan particular que si bien ganó comparaciones a grupos como Queen, Radiohead o U2, ha ido ganando identidad propia. El cierre con la colosal “The Globalist” de 10 minutos y “Drones” dan fe de toda esta experimentación de sonidos. Su mejor disco en años.